viernes, 11 de noviembre de 2011



- Un vodka con naranja bien cargadito por favor. ¿Cuánto es?


+ Hoy invita la casa.
- ¿Y eso a qué se debe?
+ Supongo que tú día hoy, no es que vaya muy bien, y pudiendo hacer la vista gorda.
- Gracias, pero no necesito compasión de nadie, y menos de una persona que acabo de conocer.
+ No se trata de compasión, si no de ayudar porqu..
- Perdón por interrumpirte pero no quiero tu ayuda. 
+ Asqueada con el mundo entiendo, estos días en los que tienes claro que le has olvidado totalmente, tu palabra mas sonada hoy es un '' yo paso '' pero en realidad, cada vez te consume más y más ese dolor que llevas ahí guardado en tu interior, y ¿sabes ? eso no es bueno, al contrario...
- Tu tienes aires de muy chulito, de madurito de saber todo de la vida, ¿no es así? Y dudo que te puedas dar esos aires cuando no conoces el dolor.
+ ¿Sabes? ese brillo en tus ojos, y esa sonrisa caída te delatan no hace falta darse aires de madurito ni mucho menos conocer el dolor para conocer tu situación.
- Mmm, vale y ya que eres tan listo, que deduces caras y todo esto, ¿que me aconsejas?
+ Es curioso ahora quieres mi consejo, verás te le daré ahora mismo dejar que te invite a este cubata bebertelo de un trago, acto seguido nos fumaremos un piti a pachas y después, simplemente comienza un capítulo nuevo en tu vida, dudo que ese chico te mereciese.
- No es tan fácil olvidar.
+ Es que nadie ha hablado de olvidar si no de recordar sin que duela.

No hay comentarios:

Publicar un comentario